martes, 26 de agosto de 2008

un niño siendo responsable


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DESARROLLO DE LOS INSECTOS

Resumen: El estudio estuvo dirigido a dilucidar las estrategias adaptativas integradas enlos ciclos vitales de insectos de los órdenes Odonata y Plecoptera que permiten mantener poblaciones en arroyos estacionales de Sierra Morena. Fueron comparadas las poblaciones y asociaciones existentes en dos cursos de la cuenca del Río Bembezar, los arroyos Calderas y Guadalvacarejo, recogiendo datos desde noviembre de 1992 a junio de 1994, con un muetreo adicional en la primavera de 1995. El único odonato abundante en estos medios es Lestes viridis Vander Linden, 1825; esta especie tiene, como en otras localidades de su extensa área de distribución, un ciclo vital univoltino, pero con importantes diferencias fenológicas respecto a las poblaciones estudiadas: muestra una larga diapausa estival en estado adulto. Los plecópteros estudiados fueron Guadalgenus franzi ( Aubert, 1963), Hemimelaena flaviventris ( Pictet, 1841),Rhabdiopteryx christinae Theischinger, 1975, Nemoura lacustris Pictet, 1865,Capnioneura mitis Despax, 1932 y Tyrrhenoleuctra minuta ( Klapalek,1903); no fue realizado el estudio de las dos especies de Isoperla (I. Bipartita e I. Pallida) también presentes en estos cursos. La primera de als especies citadas muestra una historia vital semivoltina, con larvas que deben pasar en la zona hiporreica el verano previo a su emergencia como adultos.Cuatro especies son univoltinas, con diferencias en la época de vuelo de los adultos. T. Minuta tiene una historia vital compleja, aparentemente bivoltina, conpolimorfosis alar en ambos sexos, y clara segregación temporal en la época de aparición de los machos macrópteros y branquípteros. En todas las especies de plecópteros, las larvas hembra de último estados resultaron ser significativamente mayores que las larvas macho , y la razón de sexos encontrada encontrada no fue significativamente distinta de 1:1 en G. Franzi, N.lacustris y C.mitis.

La metamorfosis de los insectos

Cómo se transforma la mariposa monarca: ---->>>>>>>

Los insectos han maravillado al hombre desde tiempos inmemoriales. Son organismos fascinantes que nos sorprenden no sólo por su gran diversidad de formas, tamaños y coloridos, sino también por las adaptaciones morfológicas y fisiológicas que presentan para establecerse en diferentes hábitats y hacer frente a los cambios del medio. Esta "plasticidad" les permite también sobrevivir gracias al uso de diferentes estrategias, ya sean hábitos alimenticios o reproductivos, entre otros.
Una excelente estrategia que adoptaron los insectos para adaptarse mejor a diferentes medios es la metamorfosis, que es el cambio de forma a través de diferentes estadios durante la vida de los organismos. Los estadios por los que pasa el individuo durante la metamorfosis son: huevo, larva, pupa y adulto.
Algunas veces los cambios son muy pequeños y los especímenes jóvenes (estadio juvenil) son muy similares en forma a los adultos (estadio adulto), el cambio se da principalmente en el tamaño. A este fenómeno se le conoce como metamorfosis simple y se da, entre otros, en chinches y pulgones de las plantas.
En otros casos, los individuos jóvenes y los adultos son muy diferentes, tanto en forma como en tamaño y hábitos. Esto se conoce como metamorfosis completa y puede ser observado en las mariposas.
Metamorfosis simple
Los insectos que pasan por este fenómeno tienen individuos jóvenes -llamados ninfas- muy parecidos a los adultos. Si son organismos que poseen alas, éstas se desarrollan externamente durante los estadios inmaduros; no hay estadio de pupa antes de la última muda, en la cual el individuo alcanza su talla final.
Hay varios tipos de metamorfosis simple:
a) Ametábola ("sin" metamorfosis). Los insectos que presentan este tipo de desarrollo no tienen alas en su etapa adulta y la única diferencia entre la ninfa y el adulto es el tamaño. Ejemplos de organismos con este tipo de metamorfosis son los protura, los colémbola y los tisanuro.
b) Hemimetábola (con metamorfosis "incompleta"). Las ninfas son acuáticas o viven en las agallas de las plantas. Difieren considerablemente de los adultos. Organismos de este tipo son las libélulas, cuyas ninfas son acuáticas y los individuos adultos son alados.
c) Parametábola (con metamorfosis "gradual"). Los individuos adultos son alados y tanto las ninfas como los adultos viven en el mismo hábitat y el cambio principal es en el tamaño. El insecto palo y la mantis religiosa tienen este tipo de desarrollo.
Metamorfosis completa
Los insectos con este fenómeno tienen un estadio pupal o pupa antes de la última muda, en el cual el individuo no se mueve y tiene un cambio muy considerable hacia la forma adulta. Si presentan alas, éstas se desarrollan internamente durante los estadios inmaduros. Poseen estadios larvales o inmaduros completamente diferentes del estadio adulto y la mayoría de las veces viven en diferentes hábitats, poseyendo diferentes hábitos. A estos organismos se les conoce como holometábolos y, como ejemplo, podemos señalar a las mariposas.
Este mecanismo permite sortear condiciones adversas como el invierno o la sequía, entre otras, e implica la interacción de diferentes fenómenos y cambios en los individuos. Para comprender mejor cómo sucede la metamorfosis, veamos qué ocurre en el caso de la mariposa monarca.
Ésta (cuyo nombre científico es Danaus plexipus), ha sido muy admirada por el fenómeno de migración en el que participa, pues uno no puede imaginarse cómo puede soportar un viaje tan largo un insecto tan pequeño y frágil; se han desarrollado muchos estudios al respecto. Sin embargo, también son de sorprender todos los cambios fisiológicos y morfológicos que los individuos de esta especie sufren a lo largo de su vida.
Como todas las mariposas, la monarca pasa por todos los estadios que suponen una metamorfosis completa: huevo, larva, pupa y adulto.

El huevo de la monarca es de un color que va del blanco grisáceo al crema y tiene forma semejante a un barril (foto 2). Vive en estado de huevo aproximadamente 7 días. Este estadio no puede considerarse en realidad una muda pues la larva se encuentra dentro del huevo y va creciendo hasta que sale y se come el cascarón. En las primeras etapas el animal tiene forma de gusano y pasa por cinco estadios larvarios en los cuales va aumentando de tamaño. Las larvas tienen franjas transversales de color negro, amarillo y blanco (foto 3) y se dedican principalmente a comer. El animal vive en este estadio juvenil aproximadamente tres semanas. En cada muda (de las cinco por las que pasa como larva) forma un nuevo exoesqueleto suave que se va expandiendo por la presión sanguínea y que posteriormente, por acción química, se endurece. En cada muda el exoesqueleto viejo se rompe y sale la larva en el siguiente estadio.
A fin de prepararse para convertirse en pupa, la larva deja de comer y elimina lo que le haya quedado de alimento en su tracto digestivo. La pupa deja el último exoesqueleto viejo de larva y permanece inmóvil.
El animal posee un sistema endocrino muy complejo y el control de la metamorfosis es realizado principalmente por tres hormonas. La primera es la hormona cerebral, producida precisamente por las células neurosecretoras del cerebro, que estimula las glándulas de la muda. Estas glándulas secretan, a su vez, ecdisona, la segunda hormona, que promueve el crecimiento de la larva. Aunada a estas dos actúa la hormona juvenil, tercera hormona, cuyo trabajo es inhibir la metamorfosis. Una vez que la mariposa ha alcanzado el último estadio larval, se deja de producir ésta, para permitir a la ecdisona promover la formación de la pupa.
La pupa es aparentemente inactiva y no se alimenta. Sin embargo, a pesar de que no posee actividad visible, es cuando el animal realiza más actividad fisiológica y en ella se llevan a cabo cambios considerables.
En este momento se produce la histólisis, proceso en el que las estructuras de la larva se transforman en el material que se va a utilizar en el desarrollo de las estructuras adultas, y la histogénesis, proceso en el que se desarrollan las estructuras adultas.
Las fuentes principales de material para la histogénesis son la hemolinfa (que es el equivalente a la sangre humana), el cuerpo graso (órgano fuente de energía en los insectos) y el tejido histolizado (como los músculos de la larva). Las alas y las patas se desarrollan de la cutícula (la piel endurecida de todo insecto, o exoesqueleto, cuya composición es de quitina) de la larva. En el último estadio larvario estos tejidos se dedican a construir estructuras adultas que se manifiestan recién cuando el insecto pupa construye su crisálida. El resto de los órganos pueden ser conservados desde la larva o pueden ser reconstruidos a partir de las células regenerativas.
El cambio de los órganos internos durante la metamorfosis depende de la actividad de éstos durante los diferentes estadios. Así, el corazón, el sistema nervioso y el sistema traqueal cambian muy poco. Otros, que están presentes de manera rudimentaria en la larva o que no existen, se desarrollan en la pupa para presentarse en los individuos adultos; tal es el caso del aparato reproductor.
La mariposa monarca tiene una pupa que por su coloración y estructura recibe el nombre de crisálida y que se encuentra generalmente pegada cabeza abajo en los troncos y hojas de las plantas. Se adhiere a la superficie de éstos por medio del cremáster, un hilo grueso a base de la seda que produce y que se encuentra al final del abdomen.
La crisálida es gruesa, de color verde pálido a verde azulado, con manchas doradas y negras, de forma oval (foto 4). Cuando se acerca la hora de que el adulto emerja, se obscurece y su cubierta permite ver a la mariposa, pudiéndose percibir el color naranja de sus alas en desarrollo (foto 5). El estadio de pupa tiene una duración aproximada de 15 días.
El adulto recién salido usualmente es de color pálido, sus alas son suaves y están plegadas. Después de un tiempo, que en la monarca es de aproximadamente 40 minutos, las alas se expanden, se endurecen y la coloración ha adquirido su tono final.
La vida de la mariposa adulta (foto 6) depende de la suerte que corra, es decir, si va a realizar migraciones, si es víctima de un depredador o de las condiciones climáticas, etc. Pero, a pesar de estas variaciones, se puede calcular que la duración del ciclo de vida completo de la monarca es de aproximadamente de 5 a 7 semanas.
Ventaja de la metamorfosis
Este fenómeno permite al animal vivir en ambientes completamente diferentes y, de alguna manera, colonizar diversos hábitats. Las larvas poseen un movimiento limitado ya que su trabajo es saciar su apetito lo que les permite acumular energía. Por el contrario, los adultos tienen una distribución muy amplia pues las alas les permiten movilizarse y desplazarse por un área mucho mayor.
También, como ya se mencionó, la metamorfosis permite al animal evadir situaciones adversas, aunque en la monarca no se presente actividad de diapausa, es decir, alargar el tiempo en determinado estadio, que por lo general es el de pupa, para sobrevivir hasta que las condiciones sean las adecuadas.

el perro y su reproducción sexual

La reproducción de los perros : --->>
El ciclo sexual, la monta, la inseminación artificial, el diagnóstico de gestación, la gestación, el parto etc son algunos de los temas que tratamos en este capítulo que esperamos sea de su interés.
En las hembras la pubertad o capacidad para reproducirse se alcanza dependiendo de la raza entre los 7 y 12 meses de edad.
Generalmente el primer ciclo sexual se presenta entre los 8 y 9 meses de vida, pero no se recomienda que una perra tenga su primer camada antes de los 15 meses, tiempo en el que estará completamente madura física y mentalmente. Sin embargo ha habido casos de hembras que han tenido cachorros antes de esa edad sin mayores problemas para ella o para los cachorros.
Por el otro lado, los machos dependiendo de la raza están en posibilidad de iniciarse como sementales desde el inicio de la pubertad o principio de la vida adulta (15 a 18 meses de edad) cerciorándose que sus órganos genitales externos sean anatómicamente y razonablemente normales y maduros. También podemos auxiliarnos de las características sexuales secundarias como el hecho de orinar levantando la pata, mercar el territorio por medio de orina, atracción hacia las hembras, embarnecimiento del perro y producción de semen.
Características Físicas y de salud a considerar en una hembra apta para la reproducción.
Mucha gente considera que la hembra es más importante para determinar la calidad de los cachorros.
Deberá tener robustez, salud y ser razonablemente típica para la raza.
Debe estar lo mas posible libre de faltas en tipo y conformación.
Ser femenina, sin signos de nerviosismo y con buena cabeza, dentición adecuada para la raza, buen hueso, buena amplitud de pecho, pelaje y color adecuados, que todas las partes del cuerpo encajen adecuadamente una con otra (cuello con cuerpo, miembros o cola) y que tenga un movimiento libre, elástico y con alcance.
Estar en etapa de estro de acuerdo con la citología vaginal exfolitativa, examen físico general de la hebra, examen de libre de brucelosis y vigencia de vacunas
Características Físicas y de salud a considerar en un macho apto para la reproducción.
Nunca use a un perro que no ha sido probado como semental.
Utilice un perro como semental por sus méritos como reproductor no por sus campeonatos.
Debe ser un macho, con buen temperamento, una conformación típica para su raza, su sexo y sin grandes faltas en tipo y conformación.
Ser masculino, sin signos de nerviosismo y con buena cabeza, dentición adecuada para la raza, buen hueso, buena amplitud de pecho, pelaje y color adecuados, que todas las partes del cuerpo encajen adecuadamente una con otra (cuello con cuerpo, miembros o cola) y que tenga un movimiento libre, elástico y con alcance.
Examen físico general del macho, examen de libre de brucelosis, espermiograma (estudio de los espermetazoides) y vigencia de vacunas.

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Reproducción asexuada.
Este tipo de reproducción, similar a la división directa (también llamada fisión binaria) de las células puede tener lugar en los organismos uni- y pluricelulares de todos los reinos. Es frecuente entre los procariotas, los protistas y los hongos; entre los vegetales y animales, sólo en las escalas taxonómicas inferiores. Las formas de reproducción asexual, excluyendo las mutaciones[1], producen clones de células genéticamente idénticas a las maternas y entre sí. Los modos o formas de reproducción asexual pueden ser:
§ por gemación o a partir de esporas: la célula duplica su acervo cromosomático encapsulando uno de ellos, alrededor del cual se forma una cubierta de espora que protege el contenido de la nueva célula que permanece latente hasta que las condiciones propicias produzcan su germinación por absorción de agua y pérdida de la cubierta. Entre los procariotas este modo es usado cuando el organismo ha agotado la fuente de nutrición. Existen hongos, plantas y animales (v.gr., la hydra) que se reproducen a través de esta forma;
§ por fragmentación de filamentos, es el caso de algunos hongos: las esporas asexuales se forman en cadenas en el ápice de una hinfa especializada; se caracterizan por ser muy finas y son llamados conidios; también puede ocurrir en el reino animal en las escalas inferiores (v.gr., las esponjas) y entre los musgos cuyos fragmentos reproductores son conocidos como propágulos.
§ por estolones o por rizomas, es un modo asexual de reproducción de las plantas: los vástagos se originan de las yemas axilares. Los estolones son tallos largos y delgados que crecen sobre la superficie. Los rizomas también son tallos, horizontales que crecen por encima o por debajo de la superficie del suelo. Ambos producen raíces adventicias y dan origen a nuevas plantas.

2.2 Reproducción sexual.
La mayoría de los organismos eucarióticos se reproducen sexualmente lo cual requiere de dos padres[2] e implica dos fenómenos: la meiosis y la fecundación. Los organismos sexuados no se reproducen más que a partir de organismos de la misma especie, una barrera genética los separa de los organismos de otras especies (salvo en los raros casos de hibridación natural). Para pasar a la generación sexual siguiente, se deberá en un momento dado del ciclo biológico, realizar una reducción a la mitad del número de cromosomas de los gametos durante una división nuclear especial: la meiosis.
La meiosis da por resultado de la división celular, células hijas con carga cromosomática reducida; se realiza solamente en las células germinales cuando éstas producen gametos -las células sexuales-, cuya dotación será así, haploide. El proceso o gametogénesis[3] puede tener lugar en distintas fases del ciclo biológico, según los organismos, de allí que los tipos de meiosis sean: cigótica (que se lleva a cabo después de la unión de las células que se aparean), espórica (durante la formación de la espora) y somática (en los órganos sexuales productores de los gametos). En la meiosis ocurren dos divisiones celulares sucesivas, Meiosis I (Reducción) y Meiosis II (División). La Meiosis produce 4 células haploides. La Mitosis produce 2 células diploides. A la meiosis también se la conoce como división reduccional.